uñas sanas


Al gesticular con las manos atraes la mirada hacia esta parte del cuerpo, así que haz todo lo posible por mantenerlas impecables.

Al igual que otras partes del cuerpo, las uñas requieren un cuidado especial para lucir sanas y hermosas. No todas son iguales, algunas tienden a ser quebradizas o escamosas que otras son muy débiles o tardan en crecer debido al mal hábito de morderlas. Pero puedes cambiar la apariencia de las tuyas sin necesidad de invertir tiempo y dinero en un salón de belleza para que te hagan una manicura.

Fortalécelas

Es común que las uñas se debiliten debido al trato que reciben, pero puedes resolverlo a corto plazo, colocando en tus esmaltes el jugo de varios dientes de ajo o aplicando directamente sobre ellas un poco de ajo machacado durante algunos minutos, luego enjuágalas y sécalas muy bien. Otra opción es aplicar en las noches unas gotas de aceite de ricino también puedes hacer una mezcla con ocho gotas de jugo de limón, cinco gotas de yodo blanco y un ajo bien triturado, colócalas esos ingredientes en un esmalte transparente, déjalo reposar durante un día  y aplícalo en cada uña, retíralo luego de 15 días.   
    
Hidrátalas

Para estar sanas y fuertes las uñas necesitan periódicamente una dosis de hidratación. Puedes hacerlo rápido y eficiente siguiendo esta recomendación: déjalas remojando en este aceite de oliva durante cinco minutos, luego dales un mensaje para que absorban los nutrientes lo mejor posible.
Córtalas Cuidadosamente
Es preferible limarlas pero si están demasiados larga y no quieres llevarla así, hazlo siempre con una tijera apropiada o cortaúñas. El mejor momento para hacerlo es al salir de la ducha, por las uñas están reblandecida.

Límalas

Es recomendable hacerlo con una lima de cartón y no con una de metal. Previamente remójalas unos minutos con jabón neutro para ablandarlas y no maltratarlas. Lima siempre hacía una misma dirección, no lo hagas con movimientos de ida y vuelta. Para eliminar los restos que se hayan desprendido pasa la lima en posición vertical de arriba hacia abajo en solo sentido.

Devuélveles su color

El uso recurrente de esmaltes puede mancharlas, para prevenirlo, usa siempre una base protectora ante de aplicar la laca de color. Si se hacen tornado amarillentas y quieres limpiarlas, sumérgelas de vez en cuando en zumo de limón y leche. Puedes probar también ponerlas una vez por semanas en 250ml de agua tibia con una cucharada de agua oxigenada, durante 1ª minutos.

Evita la acetona

Cuando debas remover la pintura, escoge productos suaves, sin acetona porque este químico debilita la keratina y las reseca. Te llevará más tiempo remover el esmalte pero será en beneficio de la salud de tus uñas.

Dale un descanso 

De vez en cuando conviene dejarlas respirar, al natural, sin ni siquiera esmalte de tratamiento. Intenta no pintarlas y despintarlas más de una vez por semana para que no se maltraten en exceso.
Hay tres ingredientes que son aliados a la hora de cuidarlas. El ajo; las fortalece y evita la aparición de hongos, el aceite de oliva; las nutre, y el zumo de limón; las blanquea y endurece la superficie.